El pabellón de Argentina en la Expo de Milán recibe
cada día miles de espectadores para contar, con sonido e imágenes, su historia
y la riqueza de sus fértiles tierras.

El espacio tiene forma de silos alineados, y su extensión
es de unos 1.900 m², por lo que el público internacional de la Expo es recibido
en un recorrido multisensorial en el que el espectador se ve envuelto en
sonidos, en la historia y en el interminable paisaje agrícola del segundo país
más grande de América Latina, todo ello bajo el lema “Argentina te nutre”.

El recorrido sonoro empieza en la planta baja y prosigue
a lo largo de las escaleras exteriores que permiten el acceso al primer piso de
los silos, el espacio interior que representa el centro del concepto
expositivo. Aquí, una proyección de 360° y una banda sonora minimal sumergen al
público en la riqueza de la historia y de la producción agrícola argentina.

En este contexto, la elección del sistema audio resultó
determinante para asegurar la “inmersión” de los visitantes en los ambientes
argentinos. Al mismo tiempo, se necesitaba que las dimensiones y el diseño del
sistema fueran extremadamente discretos para no interferir la fruición de la
imagen proyectada y de las instalaciones.

La solución llegó a través de Todomúsica, distribuidor
oficial de dBtechnologies en Argentina. Cuando se le consultó la instalación,
vio en los sistemas activos compactos dBtechnologies la solución ideal.

El Minibox L160D es un altavoz activo extremadamente
compacto y ligero (solo 5,9 kg), perfecto para instalaciones permanentes o
semipermanentes, como en este caso, mientras que el SUB 28D, con solo 29 cm de
longitud, ha resultado la elección adecuada para dar profundidad al sonido sin
excederse en el tamaño.

Para un rendimiento óptimo, el sistema se ha subdividido
en clústeres compuestos de dos L160D a los lados y un SUB 28D en el
centro, con un total de unos cincuenta top y unos veinte sub.

Todos los altavoces han sido colocados en el techo del
recorrido expositivo, tanto en el exterior, la planta baja y a los largo de las
escaleras, como en el interior, reservado a proyecciones, creando un pasillo de
sonido que acompaña al espectador a lo largo de toda la visita.